EL primer registro del edificio consta de 1434, aunque se sabe que el edificio es mucho más antiguo, ya que no hay registros anteriores. La costumbre era nombrar a la calle con el nombre del personaje más importante que había vivido en ella. Se conocía la calle con tres denominaciones: Carrer del Forn de Urba Salord, carrer dels Banys i carrer que va de la Esglesia Major al Portal de la Mar.

El primer propietario que se conoce del horno fué Joan Coll. Después sabemos que fué propiedad, entre 1531 y 1535, Lluc Rosselló. Se trataba de un horno público que tenía que cocer el pan de casa para sus parroquianos, así como otros productos como carnes, formatjades, cocas, etc... No se podía abrir libremente un horno sin la obligada concesión del Real Patrimonio al que había que pagar anualmente un tributo. En este caso, la cantidad a pagar, el dia de Pascua, era de ocho salarios.

La ciudad fué completamente destruida, el 9 de Julio de 1558; los turcos entraron dentro de la Ciudadela después de una heróica resistencia. Ni una sola casa quedó en pié, las de esta calle no fueron una excepción, pero el horno fué reconstruido en el mismo lugar, continuando con su actividad, hasta que en 1971 lo compró la familia Larequie Ventura, para convertirlo en el actual restaurante en el año 1978.

En la actualidad la família Larequie Ventura sigue con la misma ilusión y pasión que el primer día. cuidando y manteniendo su cocina tradicional y a la vez actual que ha pasado de padres a hijos. 

Hoy en dia, Daniel Larequie (hijo), hace más de dos décadas que tomó el relevo de Daniel Larequie (padre) y mantiene el negocio familiar, conservando la arquitectura del local y la tradición en sus platos.